mi irresponsabilidad

Esta es una hermosa noche para ejercer,
de alguna sórdida manera,
mi tan bien mentada y bien guardada irresponsabilidad.

zafarme de mis ataduras sociales,
y hurgar en mis viejas agendas de citas,
esas citas perdidas por la desidia de creerme responsable.

Dejar , por un rato de lado, los relojes carceleros,
y sentarme decididamente a beberme el cielo,
las nubes y las tormentas que trajeron los recuerdos.

Esta es una hermosa mesa, para volver a tropezar
con el repleto cenicero de mi mala salud de nuevo,
esperando que el mesero no de vueltas las sillas del sueño.

Alejarse de la vejez, que se empecina en seguirme a donde voy,
olvidando que soy joven aun en algún desvelo,
y me ata los cordones de la infancia con un gesto funesto.

Esta muy clara la noche, parece llovida la vida.
cobijarse dentro del saco, y dentro de los zapatos.
esta muy clara la noche, parece llovida la vida.


Fin